Tenemos todos una mala costumbre en los museos: ver las obras de todas las salas cumpliendo cada uno de los siguientes pasos. Primero: Nos acercamos a la obra. Segundo: Inconscientemente, intentar buscar un movimiento que cumpla las características para sentirnos algo más seguros ante el desconocimiento que nos provoca (¿impresionismo?, ¿expresionismo?, ¿pop?). Tercero: ver que no encontramos ninguno. Cuarto: leer el cartel que acompaña a la obra; algo así como ‘Trigal con cuervos’, de Van Gogh, año 1890. Quinto: darnos cuenta de que no nos ha servido de nada, asentir y volver a cumplir el paso 1 con la obra siguiente. Y así un museo es un auténtico aburrimiento.
No vamos hablar de las visitas de museos de los colegios, que normal que no queramos pisar ninguno.
Si esto no nos ocurre, el otro caso es que conozcamos la obra. Pues no la conocemos, simplemente la reconocemos. Vamos al Prado, vemos las Meninas, y nos creemos seguros ante ella porque, ¡ah, esta obra sé cuál es! Y lo peor (y lo mejor) de todo, es que no sabemos nada sobre ella. De ahí las barricadas que se organizan frente a Mona Lisa en París o los dos guardias de seguridad que tienen que custodiar el Guernica de Picasso en el Reina Sofía.
Pues voy a decir unos consejos para entender mejor las obras.Y, por cierto, no veas todas, sólo unas pocas de todo el museo.
1. Quién te ha hecho
En esa insistencia tan tonta de mirar el cartel que acompaña a la obra hay algo de acertado: saber quién ha hecho la obra puede ayudarnos a comprender un poco más. Sobre todo en el arte contemporáneo, cuando el artista toma el mando y las obras se vuelven voluntariamente reflejo del mundo personal por el que atraviesa.
Un ejemplo: El siguiente cuadro de Vicent Van Gogh "Trigal con cuervos" quiso expresar soledad y tristeza, ya que fue el último cuadro antes de suicidarse.
2. Para qué te hicieron
Pregúntale: ahora estás en un museo porque nos gusta tenerlo todo ordenado pero, ¿dónde has estado? y, sobre todo, ¿para qué servías? Si es que servías para algo, claro.
PD: si vas al museo del British o louvre la pregunta de donde ha estado es interesante porque muchas obras son robadas
El Guernica de Pablo Picasso. Ahora descansa en el Reina Sofía, entre otras cosas porque ya no puede más. Literalmente. Está muy débil debido a todos los viajes que ha vivido. Como ya sabemos fue un encargo del bando republicano durante la Guerra Civil española. Es decir: propaganda. Así que estuvo viajando por toda Europa y sirviendo como decorado de fondo de muchas de las conferencias de políticos.
Estos dos cuestiones me parecen las más fundamentales, pero también puedes preguntarte en que contexto histórico se encuentra y corrientes de pensamiento.
Para finalizar a mi hace dos años no me interesaba mucho la pintura, pero desde que empece las clases de historia del arte, con un profesor que se ha convertido hoy en día en un amigo, Comprendí más este mundillo y descubrí lo interesante que puede llegar a ser.